SERENIDAD PARA DESCONECTAR: LA IMPORTANCIA DE LO COLECTIVO
El pasado jueves 1 de agosto se realizó la exposición colectiva y subasta “Serenidad para desconectar”, un espacio donde artistas con diferentes propuestas convergieron para dialogar en torno a un tema común. Partiendo de la necesidad de revertir la rapidez con la cual vivimos en la actualidad, más de una decena de artistas que ejercen dentro del contexto local, expusieron sus formas de representar la calma que tanto se anhela. La unión fue el elemento crucial que permitió que un foro como este pudiera realizarse, no solo desde la conjunción de artistas y sus obras, sino desde la gestión y la organización. Para que esto fuera posible Impulso Galería, Collective Art y Arte Berraco, unieron espacios, equipos y capacidades para albergar el trabajo realizado en torno a una temática tan actual y necesaria.
Además de la obra que se inauguró como parte de la muestra, esta mágica noche contamos con la presencia de Juan José Díaz Infante como representante y gestor de la colección de PopUp Subastas. Arte Berraco abrió sus puertas para recibir piezas certificadas de grandes artistas como Andy Warhol, Banksy, Henri Matisse y Jose Guadalupe Posada. Las cuales no solo estuvieron en exposición para el disfrute de los asistentes, sino que junto con el resto de las piezas de artistas nacionales y locales, entraron a una dinámica de subasta que además de ser emocionante y divertida, permitió dar salida y movimiento a una gran variedad de arte, a precios que comúnmente son difíciles de encontrar.
Al formar parte de estas dinámicas y ver la interacción de las personas que asistieron al evento con los distintos tipos de arte, la variedad de visiones respecto al mundo y diferencia que existe a la hora de representarlas, me quede pensando en lo crucial que es para el desarrollo de lo artístico en la actualidad generar espacios colectivos y otros foros de exposición que permitan socializar el arte y darle un flujo entre las personas; para expandir la experiencia y el disfrute.
Pues el arte, en su esencia más pura, es un reflejo de lo colectivo, algo que nace del alma y que se magnifica cuando es compartido. Por ello, hacer exposiciones colectivas es como trazar un mapa de visiones, ideas y perspectivas que se entrelazan, creando un tejido rico y diverso que dialoga con quienes lo observan. En estos espacios, la voz de cada artista se convierte en un eco que resuena, no en soledad, sino en la armonía de lo que se une, donde lo individual encuentra su fuerza en lo compartido.
Pensar en nuevas formas de exponer el arte es una invitación a romper con las convenciones, desde las exposiciones colectivas, los PopUp, o las subastas, tenemos una invitación a explorar terrenos desconocidos donde la creación y la observación se encuentran de manera orgánica y viva. Es un llamado a llevar el arte más allá de las convenciones e insertarlo en dinámicas que incluso permiten mayor acceso para llevar a casa una obra.. Así, el arte se convierte en un puente, un lazo que une a las personas y las conecta con algo más profundo y colectivo.
Mar Llamas